Si le preguntas a cualquier persona que se dedique a crear contenido para redes sociales qué opina sobre la piratería, te dirá que es uno de los grandes males del siglo XXI. Cualquier persona puede descargar el vídeo que tanto trabajo te ha costado hacer y subirlo a su perfil, pudiendo incluso llegar a lucrarse con él. Hay cientos de cuentas que se dedican a esto, seguro que conoces más de una, e Instagram y Facebook es su patio de recreo. Si bien es cierto que los algoritmos de las redes de Zuckerberg son muy efectivos para algunas cosas, para otras no lo son tanto. Hoy los hemos puesto a prueba en su nueva plataforma, Instagram TV. Recientemente lanzada, IGTV, que apuesta por el formato vertical, se configura como el futuro del consumo multimedia en smartphones. Por si alguno no lo conoce, es una nueva herramienta de Instagram que permite subir vídeos de entre 15 segundos y 60 minutos –aunque a nosotros nos da un máximo de 10– en formato 9:16 cuya viabilidad todavía está en entredicho. Hay muchas personas que viven de Instagram, la publicidad y los sponsors, y su trabajo depende de que su contenido sea original y genuino. Ardua tarea, teniendo en cuenta que la piratería en esta app está a la orden del día. Poniendo a prueba los algoritmos antipiratería de Instagram Para comprobar cómo se comporta Instagram a la hora de asegurar el trabajo de artistas y creadores, hemos descargado algunos vídeos musicales, trozos de películas y series, y contenido generado por otras personas de relevancia en Internet. Los hemos subido directamente a una cuenta de prueba con 0 seguidores y 0 seguidos, sin editar ni nada, para ver si Instagram reacciona y, en caso de que lo haga, cómo lo hace y cuánto tarda. Estos han sido nuestros resultados: Vídeos musicales y vídeos con canciones: ya subas el videoclip original o un vídeo con una foto y la canción sonando de fondo, la plataforma lo detecta ipso facto y lo elimina con una velocidad increíble. En la foto de arriba puedes ver el correo que hemos recibido. Fragmentos de películas y series: igual. Instagram detecta la infracción de copyright en cuestión de segundos y no tarda nada en borrarte el vídeo. No sabemos qué loco estaría dispuesto a ver una peli o serie en este formato, pero está bien saber que no se podrán piratear. Contenido de otros creadores: aquí es donde la plataforma falla. Hemos subido vídeos de diferentes youtubers e instagramers muy conocidos y la red social no ha detectado ninguno de ellos. En este sentido, Instagram peca de lo mismo que peca Facebook y demás redes sociales, y es que no protege a los usuarios que publican su contenido en la plataforma. YouTube, en este sentido, funciona mucho mejor. Si bien es cierto que los artistas pueden estar tranquilos, los creadores de contenido, que son los que hacen que Instagram sea rica, interesante y atractiva, no pueden. Es una realidad que Instagram TV es un escaparate para dar a conocer tu trabajo y tus capacidades, pero no es segura en el sentido de que ofrece total libertad para piratear contenido de otros usuarios de la red. Es verdad que en los términos y condiciones de uso recoge que debes tener permiso para publicar cualquier cosa y que tú, y solo tú, eres el responsable de lo que hagas con él, pero no ofrece ningún otro tipo de garantías más allá de borrarte la cuenta llegado el momento. La respuesta a esta dicotomía es sencilla, y es que Instagram no puede estar pendiente de todo lo que se sube a la red social. Así, casi que recae en el propio usuario afectado denunciar la publicación que muestra contenido pirateado. A modo de resumen, podemos decir que si Instagram quiere que Instagram TV triunfe y sea una plataforma potente, debe proteger a sus usuarios y a su trabajo. Una persona que haga sus vídeos en YouTube, donde sabe que su contenido está a salvo, no va a venirse a Instagram si sabe que corre el riesgo de perderlo. ¿Qué pasará con IGTV? Tendremos que esperar para verlo. --

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