Vínculo copiado
En pleno 2021 tenemos figuras totalmente pequeñas para la confrontación de ideas. Ellos se sienten más cómodos en el lugar común; la matraca, el ruido, las masas… la cerrazón. A los debates los ven ya como un mero requisito para llegar a donde quieren
10:16 lunes 24 mayo, 2021
ColaboradoresYo no sé, pero para las figuras políticas que tenemos en estos momentos en la palestra de la política local, el concepto de lo que de verdad es un debate los supera, es decir son figuras muy pequeñas para acudir a un evento democrático de confrontación de ideas y propuestas. Creo que no comprenden que los foros de debate que se realizan son para que la ciudadanía, valore y compare las propuestas de los proyectos que ofrecen cada uno de los candidatos que piden nuestro voto; pero no es así… ¿Y qué es lo que se ofrece? Fácil, repetición de sus discursos de mítines o pleitos de lucha libre. Y es que les tengo que ser honesto, si algo se ha visto claramente es que la mayoría de los candidatos carece de una característica fundamental de un buen político, qué, aunque insistan en decir que no lo son algunos de ellos, son abanderados de un partido político, es imposible que no lo sean. En fin, el asunto es que no tienen la capacidad mínima de oratoria y mucho menos de la confrontación de ideas sin llegar a la exaltación; pues muchos de ellos sólo están acostumbrados al aplauso, la matraca y el montón de séquitos que no los cuestionan y a todo les dicen “Sí señor candidato”. Es terrible que en pleno 2021, en las elecciones más grandes de la historia tengamos debates de una calidad infame, no hay verdadera confrontación de ideas y los candidatos ni siquiera intentan prestarse a ello. Una cosa es clara, aquí… por lo menos en San Luis Potosí, la forma de hacer política para los candidatos es el mitin multitudinario, apostarle por la repetición constante de la “spotiza” tanto en medios de comunicación como en redes sociales, dos que tres entrevistas y ya. Al debate ni lo cuentan porque es como ese examen parcial que ni les da ni les quita, pero que prefieren algunos hasta no asistir. Es así que nos damos cuenta de que calidad están hecha los políticos que tenemos ahora, sin la capacidad de comparecer ante la ciudadanía porque no se atreven, ellos se sienten más cómodos en su hábitat natural: la matraca, el amontonamiento, el ruido, la cerrazón, el aplauso condicionado… ahí donde nadie los cuestiona, ni les pide que se den una vuelta por ese San Luis real del que se han mantenido ajenos, porque creen que desde su pequeña burbuja de privilegios ahí San Luis está muy bien y sólo ellos pueden resolver los problemas del resto de los potosinos. Qué triste realidad, para el enorme reto que viene. Nos leemos la próxima semana, hasta entonces… hasta siempre.