El ministerio de Seguridad de Brasil implementará una estrategia de seguridad para salir del primer lugar que ocupa esa nación en el índice de homicidios, superando incluso a Siria, país en guerra. Raul Jungmann dijo este miércoles que el país quiere reducir en 3.5 por ciento el número altísimo de muertes violentas del año pasado, que le hizo “campeón absoluto de homicidios en el mundo”, según sus propias palabras. Entre 2011 y 2015 Brasil registró mayor número de muertes violentas que Siria, un país en guerra, durante ese mismo periodo, según datos del Foro Brasileño de Seguridad Pública, una organización que mide la criminalidad en el país. El tema de la violencia en Brasil, fenómeno que se recrudeció con la crisis económica de los últimos años, es uno de los temas centrales de la campaña en un país azotado por la violencia. La cuestión de cómo combatirlo generó una gran polémica durante la campaña electoral, pues el diputado Jair Bolsonaro, líder en las encuestas, se posicionó a favor de “armar a la gente honesta porque todos los bandidos lo están”. Se trata de un tema delicado, pues en 2003 Brasil aprobó una ley para tratar de reducir el número de armas en circulación, al considerar que era una medida efectiva para combatir la criminalidad. Con todo, datos del año pasado mostraron que solo en 2017 fueron registradas 33 mil nuevas armas, 10 veces más que en 2004, cuando entró en vigor el estatuto para el desarme en el país. Los asesinatos con arma de fuego, por su parte, no han cesado de crecer en un país que de enero a julio de este año ya registró más de 30 mil muertes, según datos del portal de noticias G1. --

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