Desde la sana distancia y desde nuestro hogar, así como lo han recomendado las autoridades sanitarias, quiero reconocer el trabajo de médicos y enfermeras que el día de hoy están en la primera línea del frente de batalla con el Coronavirus, así como también reconocer a todos los equipos de trabajo de hospitales públicos y privados y en general a todos los colaboradores del sistema de salud en nuestro país, así mismo aquellos trabajadores que hoy en día laboran en actividades esenciales para que nosotros podamos estar en casa.  Por otro lado, quiero hacer un énfasis y un reconocimiento hacia todos mis colegas de Recursos Humanos que, al día de hoy, Directores, Gerentes y los equipos de R.H. enfrentan junto con sus Directivos o dueños de pequeñas y medianas empresas la gran tarea de por un lado, de haber parado producción y por otro tomar la decisión de seguir manteniendo a sus trabajadores mediante diferentes estrategias.  San Luis Potosí se ha convertido en un referente de cómo poder llevar una buena relación laboral que no se construye a partir de la pandemia, sino que tiene años de una excelente comunicación entre sindicatos y empresas; esto le permite a la autoridad poder enfocar sus esfuerzos también en la reconstrucción de lo que próximamente será el desarrollo económico de nuestro Estado, sin embargo, el frente de batalla de recursos humanos, insisto, tiene un por un lado como resolver el tema del trabajo a distancia y cómo resolver diferentes eventualidades que suceden para que la empresa pueda seguir hasta donde su capacidad le sea posible funcionando.  En las áreas de producción enfrentan un enorme reto: poder negociar a través de estos convenios las modificaciones de los contratos de trabajo, tarea nada sencilla pero que gracias a esa confianza, hemos sido un referente para el país. Por otro lado, las decisiones nada sencillas para poder desplazar o reducir nómina en áreas no esenciales para las compañías, es un proceso doloroso pero es real, tan real como en los hospitales cuando un paciente tiene que ser internado en terapia intensiva y no saber qué futuro le depara, en el mundo laboral también se toman decisiones extremadamente complejas que afectan a esa persona, a ese ejecutivo de Recursos Humanos, pues a la hora de irse a descansar no se puede uno despegar de su mente el rostro de ese trabajador de preocupación y de angustia dónde está pidiendo no solo una oportunidad porque sabe que él ha cumplido con sus actividades sino que más bien lo que está pidiendo es algún esquema que le permita a el poder subsistir y por ende proveer a su familia, por eso, este otro frente de batalla es muy importante reconocerlo, se está haciendo un esfuerzo enorme para no desplazar al personal; sin embargo, hay que estar preparados ante el reto de que vendrán semanas y meses muy dolorosos, los cuales nos van a impactar, por eso quiero desde hoy reconocer a cada uno de los trabajadores y colaboradores (as) de las áreas de Recursos Humanos; venga un abrazo, mi solidaridad y respeto para las acciones que hoy les toca de emprender.

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