Si el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, es puesto al frente del Banco de México asumiría su función cabalmente y con independencia, aseguró Agustín Carstens, gobernador de esa institución. “Yo estoy seguro de que si Meade llega al Banco de México asumiría su papel cabalmente”, afirmó Carstens en entrevista con Carlos Loret de Mola para Despierta. Reiteró que el Banco de México no depende de una persona, por lo que en las decisiones de política monetaria. "Meade va a tener un peso de 20 por ciento... el Banco de México está sujeto a un mandato claro y también la ley hace que no dependan de una persona”, afirmó. Aseguró que no se siente preocupado por quién vaya a ser el nuevo gobernador de la institución, pues los integrantes de la junta de gobierno son los que toman las decisiones colegiadamente y conocen el desarrollo macroeconómico de México. Sin embargo, Carstens dijo que su remplazo debe de tener tres grandes características: “que conozca bien la macroeconomía de México, el funcionamiento de los mercados; que crea en la autonomía del Banco de México y en su labor; que sepa comunicar”. Respecto a si apoya una posible candidatura de Meade a la Presidencia de la República, el gobernador del Banco de México dijo que el secretario de Hacienda es “un amigo, un buen amigo, un colaborador mío, yo tengo simpatías con él, pero no es el único con el que yo pensaría que México podría hacerla bien hacia adelante”. No estoy satisfecho con inflación El gobernador del Banco de México dijo que se va poco satisfecho por el aumento en la inflación, aunque aseguró que ésta se ajustará a la meta de 3 por ciento en el 2018. “Me hubiera gustado en el ámbito inflacionario que la foto hubiera sido mejor, no estoy satisfecho”, pero, “estoy en alta seguridad que estamos dejando la inflación a 3 por ciento hacia el año entrante”. Dijo que el aumento en la inflación se debe a “a precios que no están en control de la política monetaria como los agropecuarios o los energéticos”. Calificó que romper con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) sería irracional, debido a que “desde la óptica de economista, las ganancias para los tres países han sido grandes y más aún si hay una modernización”. Carstens, dijo que considera que el peso está subvaluado frente al dólar y que su nivel actual está incorporando el pesimismo en torno a la renegociación del TLCAN. "Yo creo que en términos generales (el peso) está subvaluado", dijo. Banxico no influyó en el salario mínimo Agustín Carstens dijo que no es una persona tan poderosa para intervenir en la decisión de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) de un aumento al salario, pero lo que ha hecho el Banco de México es advertir lo que puede pasar en la economía si hay un aumento desproporcionado a los sueldos. “No se puede aumentar el salario de manera real simplemente por decreto”, aseguró. Dijo que para las grandes empresas exportadoras que se han beneficiado con el tipo de cambio no tienen reservas para aumentar los salarios, pero, dijo, para las pequeñas empresas de servicios no comerciales ello representa un costo muy grande. Explicó que para esas empresas un aumento salarial implicaría aumento de precios, despido de personal o un aumento de la informalidad, por lo que “lo único que ha hecho el Banco de México es alertar que eso puede pasar”. -- MILENIO