Vínculo copiado
Incitar a la polarización en una sociedad; generar temor a partir del discurso del miedo, nunca ha traído nada bueno y menos como una acción permanente del gobierno.
23:32 lunes 8 abril, 2019
ColaboradoresLos gobernantes deben de entender para qué sirve la prensa y cuál es la función primordial de los periodistas ante la sociedad y la democracia. Los ejemplos visibles, caso Trump, nos dejan ver que no sirve de nada atacar a los medios, polarizar a una sociedad sólo lleva a las agresiones entre grupos y actores sociales; además hoy en nuestro país, los ataques se magnifican, desafortunadamente, a través del anonimato de las redes sociales. Una estrategia basada en el discurso del miedo, gasta muchas horas en generar odio entre los distintos actores de la sociedad, genera violencia y en nada nos ayuda. Si a esto le añadimos la incertidumbre por el entorno económico de un gobierno que inicia y en donde la estabilidad de la economía siempre hace que el desarrollo económico se desacelere, magnifica los problemas y no da un buen resultado para el país. Muchos mandatarios en Latinoamérica se dejan llevar por el índice de popularidad, pero es importante mencionar que la popularidad no ayuda al desarrollo de la economía, es la confianza la que hace que la sociedad invierta en el país y que esta inversión sea real y directamente en acciones que generan actividad económica. En sistemas nacionalistas, la popularidad legitima las decisiones ante el pueblo, pero éstas poco o nunca ayudan a impulsar el desarrollo económico y menos cuando la popularidad está fundamentada y trabajada bajo un esquema de otorgamiento de apoyos sociales, lo que desafortunadamente convierte a la ciudadanía en una masa social que sólo espera una dádiva gubernamental, la cual se convierte en consumo, pero no el suficiente para impulsar de manera importante el desarrollo económico. En este escenario, los periodistas y comunicadores debemos abocarnos a informar en forma veraz y oportuna a la sociedad lo que sucede y cómo avanzamos en esta que han llamado la Cuarta Transformación de la República.