Aunque ya se han entregado más de 25 mil apoyos como parte del programa emergente “Canasta Básica”, el coordinador de las acciones incluidas en el Programa Integral de Reactivación Económica por el Covid-19, Jorge Francisco Arias Hernández mencionó que no han podido entregar 5 mil canastas porque no se encuentra a las personas beneficiarias en sus hogares.

Por eso, hizo un atento exhorto a la población que resultó favorecida con ese programa, “estar en sus domicilios ya que solamente se entrega al o la titular que se inscribió, a nadie más se le puede dejar el apoyo. Además hay que recordar que debemos atender la recomendación de permanecer en casa de las autoridades sanitarias”.

Detalló que antes de acudir al domicilio, se hace una llamada generalmente vía celular por parte de quienes distribuyen las canastas para asegurar que se encuentran las personas en sus casas, de ahí que hizo un reconocimiento a la labor diaria tanto de personal de distintas áreas municipales como de mujeres y hombres que a través del otro programa emergente “Empleo Temporal”, ayudan en el armado y distribución de estas despensas.

“Es un esfuerzo extraordinario y necesitamos mantener esta relación y comunicación directa para cumplir con las metas establecidas y garantizar que las canastas llegan a quienes realmente las necesitan. Es poco el personal, por eso, la importancia de que estén en casa para que reciban su apoyo municipal a las puertas de su hogar de parte de quienes nos apoyan con todas las medidas de sanidad exigidas por la pandemia”.

Arias Hernández también hizo un agradecimiento público a diversos sectores de la sociedad que ha aportado donaciones en especie y a otros más que estén interesados en sumarse a este programa emergente, “ya que tienen la confianza de que los apoyos alimentarios llegan realmente a las familias muy afectadas por la contingencia que se mantiene”.

Finalmente, recordó que el personal que se encarga de la distribución de las canastas básicas está debidamente identificado y tanto éste como los demás apoyos municipales no se entregan bajo ningún tipo de condicionamiento como sí se daba en el pasado, ni con ningún otro fin que no sea coadyuvar con los sectores vulnerables.