En medio de la avalancha informativa que hemos vivido a partir de los sismos poco o nada se ha conocido de la situación en Guerrero que no solamente fue afectado por el movimiento telúrico sino azotado por el huracán Max.

En este sentido la pérdida de vidas humanas y los daños combinados por estos dos fenómenos naturales se cuentan de la siguiente manera.

?       Seis personas murieron

?       6 mil viviendas afectadas

?       daños por más de mil millones de pesos

?       100 escuelas afectadas, hoy sin funcionar

?       Cientos de damnificados

Como lo comenté hace unos días, no hay una tragedia peor que la otra, pero si las hay más mediáticas que otras y la cobertura periodística no ha hecho justicia a lo que se vive en la entidad.

Es urgente que se mire también a Guerrero y que los apoyos en especie y económicos encuentren ruta a la costa del Pacífico