El gobierno federal aspira a recaudar este año 342 mil 53 millones de pesos por concepto de Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) de combustibles, lo que implicará un aumento de 11 por ciento real frente a lo obtenido en 2019, revelan cifras de la Secretaría de Hacienda.

Así, en el segundo año de la actual administración, la recaudación por combustibles seguirá siendo uno de los salvavidas que tendrán las finanzas públicas este año, pues en 2019 las metas fiscales se alcanzaron en parte porque estos ingresos fueron 28 mil 178 millones de pesos superior a lo estimado en la Ley de Ingresos Con esto, el IEPS de combustibles fue el único impuesto que superó las metas de recaudación el año pasado, debido a los muy reducidos estímulos fiscales que se otorgaron a lo largo del año, y amortiguó la merma en los demás ingresos tributarios. Dada la reducción de los precios internacionales del petróleo observada este año, el gobierno también ha otorgado muy pocos estímulos fiscales a las gasolinas, siendo para la gasolina Magna 6.6 por ciento de la cuota autorizada a cobrar entre el 1 de enero al 14 de febrero de este año, en tanto que para el diésel los apoyos han sido de 7.6 por ciento. En cambio, para la gasolina Premium, este año el gobierno no ha dado estímulos. Así, de resultar mejor a lo esperada la recaudación por IEPS de combustibles, se reduce la probabilidad de usar de nueva cuenta recursos del Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios, que este año se espera sean de 80 mil millones de pesos. RECAUDACIÓN

Adrián García, investigador de Ingresos Públicos del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), explicó a Excélsior que para este año la recaudación del IEPS volverá a ser favorable para el gobierno, y es probable que pueda alcanzar o incluso superar la meta de recaudación. En lo que va del 2020 vemos un patrón que se observó en 2019, que fue que el bajo precio del petróleo permitió al gobierno otorgar muy pocos estímulos fiscales a las gasolinas, razón por la cual pudo recaudar mucho de este impuesto pese al estancamiento económico. Ahorita vemos un precio del petróleo promedio por debajo de los 49 dólares por barril estimados en el Presupuesto, por lo que, de continuar así en el año, el IEPS de combustibles seguirá siendo un amortiguador de la eventual caída del resto de la recaudación tributaria”, comentó el experto del CIEP.

García manifestó que la recaudación por gasolinas depende más del precio internacional del petróleo que del crecimiento económico, ya que la demanda por combustibles es conocida como inelástica, lo que significa que se mueve muy poco ante cambios en el ingreso o en los precios. Aunque el ingreso suba o baje, la gente seguirá demandando gasolinas por la necesidad de movilizarse y transportar bienes. Y lo mismo pasa con el precio, si sube, quizás exista un pequeño ajuste en la demanda, pero ese ajuste es menor que el que se registraría en otro tipo de bienes. El que la gasolina no tenga sustitutos lo convierte en un bien con demanda inelástica”, expresó García.

LA FÓRMULA

Adrián García se refirió a la fórmula que usa la Secretaría de Hacienda para fijar los estímulos al IEPS de combustibles de forma semanal, de acuerdo con la evolución de los precios internacionales del petróleo, implementada desde inicios de 2017. Yo calificaría como exitoso el uso de esta fórmula, porque creo que ha dado resultados. Cuando los precios del crudo suben, se otorgan estímulos para evitar que el movimiento de los precios internos sea abrupto, pese a que con ello el fisco sacrifica recaudación. Y cuando los precios del crudo bajan, se reducen los estímulos aprovechando ese espacio para recaudar más. Entonces, la fórmula ha cumplido con un doble rol, tanto para suavizar los movimientos de los precios internos como para recaudar más para el Estado”, expresó el experto del CIEP.

-- Con información de Dinero en Imagen

Foto: Pxfuel