La designación de un mando militar en la Guardia Nacional, es una medida que traiciona los acuerdos de las fuerzas políticas para aprobar la iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador y viola los términos de la ley que la creó, donde se establece que debe ser un mando civil. El coordinador del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI), diputado Mauricio Ramírez Konishi, dijo que la decisión presidencial “se puede interpretar como que nos dio gato por liebre a todas las fuerzas que apoyamos la propuesta de la Guardia Nacional, bajo otras reglas”. “Tener un mando civil fue el acuerdo que se tomó y mientras un general esté en proceso de retiro, sigue siendo miembro de las Fuerzas Armadas, es un tema que fue ampliamente comentando y no podemos ser omisos ante una situación así, se trata de un nombramiento sumamente importante”, añadió. El diputado Ramírez Konishi expuso que “es muy clara la ley, o eres civil o eres militar, no puedes ser medio civil o medio militar, de tal manera que sería un nombramiento que no tendría el soporte correspondiente, no dudo que sea una persona capaz, con las cartas para hacer bien su trabajo y enfrentar un proyecto tan importante, pero no puede empezar violentando la ley”. Manifestó que la postura que está asumiendo el gobierno federal sobre este tema “se puede entender como un reto, una confrontación innecesaria, porque se está violentando algo que emanó de todas las fuerzas políticas y políticamente no es sano para el sistema democrático”. Expuso que “las cosas se deben hacer de una mejor manera y no hay otra que el respeto a la ley, pues no es concebible que el responsable de cuidar la seguridad de los mexicanos llegue al cargo por una violación a la ley, ya que es claro que debe ser un mando civil, no militar”.