Cada vez que se habla de talento y trabajo en el siglo XXI nos viene a la cabeza palabras como tecnología, digitalización o automatización, la inteligencia artificial nos ha situado en una visión diferente del trabajo: obliga a cualquier profesional o empresa a adquirir nuevas competencias tecnológicas, de esto hemos estado hablando en colaboraciones anteriores, pero también debemos trabajar dos competencias básicas subyacentes: la capacidad de aprendizaje y la capacidad de emprendimiento; por ello durante las primeras décadas del siglo XXI las empresas y trabajadores han asumido y puesto en marcha medidas para la transformación digital y programas de reciclaje, información permanente, ¿Cuál es su objetivo? Abordar el reto de evolucionar siempre hacia delante y de forma continua, marcados por el entorno cambiante de las tecnologías emergentes. Ahora en el año 2020 junto al reto digital aparece con fuerza en el panorama de la gestión del talento una nueva tendencia: los objetivos de desarrollo sostenible, los denominados objetivos de desarrollo sostenible se configuran con uno de los puntos de fuerzas necesarias en los que enfocar todas las políticas y acciones de las empresas con todos sus stakeholders y en especial con las personas que trabajen en sus organizaciones. En la nueva década que comienza la salud y bienestar, la igualdad de género o crear trabajo de calidad deben ser prioridades en la estrategia de la gestión de talento, pero también otros desafíos que forman parte de los ODEC y que no tienen una relación directa con la gestión del talento o del trabajo, pero si con las personas, como el impulso de un consumo responsable y la concientización por el clima, temas que se deben abordar colocando la innovación en el centro de su misión. El compromiso con estos nuevos desafíos han de impactar en todas las áreas de RRHH, desde la selección hasta la formación y el desarrollo de todos los profesionales que trabajan en la empresa, pero se necesita la colaboración de todos los departamentos de una organización para cumplirlos, aunque es desde el departamento de Recursos Humanos donde se debe liderar este cambio sostenible y necesario. Algunas de las medidas que en este sentido debemos impulsar en este año por parte de las empresas son: programas de igualdad de género en todos los niveles Directivos, en especial en los Comités de Alta Dirección y los Consejos de Administración, en segundo lugar veremos acciones de concientización sobre los objetivos de desarrollo sostenible en colaboración con todos los departamentos de la empresa, en tercer lugar la creación de áreas que fomenten la salud y bienestar de los trabajadores y finalmente la formación constante de todos los equipos y niveles de competencias digitales. Más adelante seguiremos hablando de estos importantes temas ya que el mundo laboral transforma no solamente a las organizaciones sino también la vida personal de sus trabajadores. Twitter: @AndradeO77