A inicios de este año, Aeroméxico ‘cortó las alas’ a nueve rutas y decidió que cinco aviones se quedarán en tierra, lo que afectará su oferta de asientos y tráfico de pasajeros, consideraron expertos del sector. “Dado que la capacidad no crecería en 2019, tampoco estamos previendo crecimiento en la demanda de asientos (RPK) ni en pasajeros transportados, dado que no esperamos tampoco un aumento en los factores de ocupación”, explicó Marco Montañez, analista de Vector Casa de Bolsa. Al cierre del tercer trimestre de 2018, la aerolínea que dirige Andrés Conesa anunció su reajuste financiero, derivado de un incremento en sus costos operativos, entre los que el combustible ocupa un lugar destacado. Sin embargo, Brian Rodríguez, analista de Monex, pronosticó que el precio de la turbosina se ajustará a la baja para el año que comienza, por lo que, en general, dicho costo no mermará los márgenes de las aerolíneas que operan en el país. Durante el tercer trimestre de 2018, las aerolíneas mexicanas reportaron pérdidas totales por mil 490 millones de pesos y el costo del ‘gasavión’ representó casi 4 de cada 10 pesos de sus gastos operativos. Pese a ello, Montañez estimó que los ingresos de Aeroméxico crecerán debido al aumento en las tarifas aéreas para este año, que en promedio será de 4 por ciento. “Aunque los ingresos crecerían solo por el aumento de tarifas promedio, que estimamos en alrededor de 4 por ciento, debido a la fuerte baja en los precios de los combustibles, y a que las expectativas de los precios del petróleo también se han revisado a la baja, prevemos un mejor desempeño en la rentabilidad respecto al 2018”, concluyó el analista. --

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