Samsung Electronics presentó este domingo en el Mobile World Congress -congreso anual de telefonía móvil-, llevado a cabo en Barcelona, su último teléfono insignia: el Galaxy S9. El gigante de la tecnología con sede en Corea del Sur confía en nuevas características como emojis basados ​​en realidad aumentada, actualizaciones de cámaras y parlantes estéreo en un factor de forma similar al modelo del año pasado para enfrentarse al iPhone X de Apple. La firma también busca calmar las preocupaciones sobre una posible desaceleración de su negocio de componentes, y la capacidad del vicepresidente Jay Y. Lee para administrar la empresa siguiendo su saga legal. "El S9 es un portaestandarte de alta visibilidad con el que Samsung tiene que seguir presionando agresivamente con él", dijo Bryan Ma, vicepresidente de investigación de dispositivos en el grupo de análisis tecnológico International Data Corp. "Mi preocupación, sin embargo, es que el producto parece ser un simple conjunto incremental de "yo también", un conjunto de mejoras en lugar de cualquier cosa que lo diferencie significativamente ". Alrededor de mil 500 personas se presentaron para ver el lanzamiento en un escenario rodeado de pantallas. En demostraciones, los ejecutivos de Samsung se centraron en la combinación del asistente inteligente Bixby y la cámara -la característica más distintiva-, ya que permite a alguien traducir el menú de un restaurante, probar el maquillaje y hacer emojis que se parecen a tu cara. También reconoce las comidas para registrar calorías en la aplicación de salud de Samsung. "La cámara será un componente importante" para ayudar al S9 a destacarse del iPhone X de Apple, dijo el director de marketing de Samsung, David Lowes, en una entrevista en Barcelona. "A menudo es la característica número uno que las personas consideran. Lo que podría ser un verdadero diferenciador es la inteligencia detrás de la cámara ". Samsung desafía la función Animoji del iPhone X con su propia versión, sin embargo, la compañía no está luchando contra el nuevo diseño de Apple. Los nuevos teléfonos Samsung, que vienen en los mismos tamaños de pantalla de 5.8 pulgadas y 6.2 pulgadas, se parecen a los teléfonos del año pasado, salvo por los marcos ligeramente más delgados en la parte superior e inferior. Los nuevos modelos son más baratos que el iPhone X, con un precio desde 999 dólares. En Estados Unidos, puedes encontrar el S9 desde 720 dólares en la red de T-Mobile US hasta 930 dólares para el S9 + a través de Verizon Communications. Samsung tenía el 22 por ciento del mercado de teléfonos inteligentes en 2017, por delante del 15 por ciento de Apple, según el investigador IDC. Mientras que el iPhone X se lanzó con mucha "fanfarria" a finales de año, muchos consumidores consideran que los costosos teléfonos insignia son un lujo en lugar de una necesidad y se adhieren a modelos más baratos o generaciones anteriores, según IDC. El S9 está a una generación del explosivo desastre de la compañía en 2016. Y es el primer teléfono nuevo de Samsung presentado desde que Lee fue puesto en libertad con una pena de prisión suspendida por soborno. Las ventas del dispositivo serán una prueba del desempeño de Lee después de que sus habilidades como gerente comercial se cuestionaran durante la saga legal. El sistema de cámara del último modelo toma mejores fotos en entornos con poca luz y tiene un nuevo modo de captura de video a cámara lenta. El S9 estándar incluye una sola lente trasera, mientras que el S9 +, como el iPhone X, incluye dos cámaras traseras para capturar la profundidad en las fotos. Los productos de Samsung también han sido menos integrados que los de Apple. Samsung está tratando de cambiar eso con el S9 haciendo que funcione mejor con sus televisores y otros dispositivos, y su plataforma SmartThings conectada a casa. La compañía también está preparando su propio parlante inteligente para competir con Amazon Echo, Google Home y Apple HomePod, informó Bloomberg News el año pasado. -- El Financiero