WASHINGTON. Una vez más, Estados Unidos se lanza contra los niños migrantes. El gobierno del presidente Donald Trump presentó nuevas normas que permitirán a las autoridades detener a las familias de inmigrantes por tiempo indefinido. Las nuevas normas reemplazarán al Acuerdo Flores, aprobado en 1997, que limita por 20 días la estancia de las familias en los refugios. Sin embargo, las autoridades del gobierno culpan al acuerdo del aumento de la inmigración, afirmando que alienta a las personas a llevar niños con ellos para que sean liberados en Estados Unidos mientras sus casos judiciales están pendientes. En este contexto, funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), que hablaron bajo condición de anonimato, explicaron que la nueva norma tendría un efecto disuasivo al mostrar a los potenciales inmigrantes que no serán necesariamente liberados en el país si llegan a la frontera con niños. Las familias generalmente tienen que esperar varios meses para que sus casos avancen en las cortes de inmigración, dijeron funcionarios del DHS, y la nueva norma permitiría a la cartera mantener a las familias en instalaciones de detención. Trump señaló que su gobierno analiza eliminar el derecho de la nacionalidad de niños nacidos en el país, cuyos padres no tienen la ciudadanía o migraron de manera ilegal. En declaraciones a la prensa afuera de la Casa Blanca, Trump calificó de “francamente ridículo” que se otorgue la nacionalidad a los hijos de quienes cruzan la frontera. -- EXCÉLSIOR / AFP