Luis Urías llegó sin carrera producida, Alex Verdugo con sólo un hit en 16 turnos en la primera ronda, pero ambos se mantuvieron en el orden al mexicano. La confianza de Benjamín Gil rindió frutos justo en la noche correcta, y ambos fueron clave para el histórico triunfo mexicano. Son jugadores consolidados en Grandes Ligas, un talento entre los mejores del mundo, ahí compiten ellos todos los días”, dijo Gil. Estamos en marzo, ellos, no están acostumbrados a ahorita están su mejor versión. Con todo eso es imposible pensar en moverlos, tenemos confianza plena en ellos y hoy demostraron el porqué les tenemos esa confianza”. México se sobrepuso a un déficit de cuatro carreras en las primeras entradas, justo en el aniversario de una de otra de las grandes proezas del deporte mexicano, cuando en 1990 Julio César Chávez noqueó en el último momento a Medrick Taylor, en una pelea que tenía perdida en las tarjetas. Es muy emocionante que sea en este día, creo que no es casualidad, creo, en campos diferentes pero son hazañas similares, porque nunca nos dimos por vencidos, parecía muy difícil, batear a un gran pitcheo y no descuidarnos de una muy poderosa ofensiva”. En ningún otro deporte de conjunto, en categoría absoluta, México había estado entre los cuatro mejores de un campeonato mundial. Gil asegura que, ante Japón en semifinales, aún no hay nada resuelto. Estamos muy emocionados, le ganamos hoy a un gran equipo, pero el lunes les queremos ganar a Japón y el martes al otro finalista. Sabemos lo que hemos conseguido, pero no es por lo que vinimos”, dijo Gil. Desde que empezamos a reclutar a los jugadores les dijimos que veníamos a ganar el campeonato, y todos estamos en la misma sintonía”. FUENTE: EXCÉLSIOR