El control prenatal adecuado permite llevar a buen término el embarazo, a través de implementar cuidados desde la etapa preconcepcional, durante el embarazo y en la etapa del puerperio conocida popularmente como “cuarentena” que evitan riesgos y benefician a la madre y al recién nacido, por lo cual la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ) realiza acciones permanentes de promoción de la salud, prevención y atención de enfermedades de la mujer gestante en todas sus Unidades médicas. “La mujer, así como prepara un viaje, como prepara una profesión, como prepara algo importante en su vida cotidiana, pues qué más que preparar un embarazo y ¿cómo lo preparamos? pues yendo al médico para que nos revise y nos haga los exámenes correspondientes” antes de concebir, propuso el enlace interinstitucional de Salud Reproductiva de la SSJ, Nahum Ariel Flores Chávez.  Durante el embarazo, lo ideal es acudir a consulta cada mes. Esta revisión periódica permite “identificar factores de riesgo en etapa temprana para poder incidir en la resolución del embarazo, que no haya sorpresas y se puedan prevenir complicaciones, en caso de que una mujer tenga un riesgo elevado de hipertensión o de diabetes”, comentó, tras agregar que se puede acudir a un médico general, a un médico familiar o un gineco-obstetra, e incluso en las poblaciones rurales se cuenta con parteras capacitadas que pueden asesorar a la mujer.  Flores Chávez expuso que se considera un embarazo normal cuando se desarrolla entre 38 a 41 semanas; éste se divide en tres trimestres: en el primer trimestre el médico se enfoca a identificar alguna enfermedad. “Es la etapa más vulnerable del embarazo, es cuando se está formando el bebé”, dijo.  En el segundo trimestre la mujer experimenta la mejor etapa del embarazo, tanto física como psicológicamente, se comienza a percibir los movimientos fetales; lo que ayuda a la mujer a detectar el bienestar de su bebé. Sin embargo, es momento de descartar o detectar diabetes gestacional y algún dato de hipertensión (preeclamsia).  

En el tercer trimestre continua el crecimiento del bebé, maduran sus pulmones y se le recomienda a la mujer estar atenta a los signos de alarma como son: sangrado, pérdida de líquido, contracciones antes de término y que no perciba movimiento fetal, lo que puede significar un riesgo. 

Las mujeres menores de 19 años y las mayores de 35 años, son las que tienen mayor riesgo en el embarazo y parto. Lo recomendable es concebir entre los 20 a 34 años de edad; así como espaciar los nacimientos por lo menos cada tres años.

BEBÉ EN CAMINO

La actual administración implementó la política pública “Los primeros 1000 días de vida”, como una prioridad para atender las necesidades de salud de las mujeres en edad reproductiva (12 a 49 años de edad) durante el embarazo, parto, y puerperio; así como la atención integral de la salud de las niñas y los niños hasta los dos años de vida.

Parte de las acciones van encaminadas a identificar riesgos en las mujeres en edad reproductiva, a fin de prevenir o atender oportunamente cualquier complicación en el embarazo o parto y lograr nacimientos de bebés sanos, por lo que se cuenta con la cartilla “Bebé En Camino” que facilita a la mujer dar seguimiento puntual a su embarazo, el parto y el puerperio en beneficio de ella y su hijo o hija.

La cartilla “Bebé En Camino” se entrega en los Centros de Salud y ayuda a la mujer a llevar un control integral de su salud, sus consultas, tratamiento, vacunas y pruebas de salud. Así mismo le apoya para identificar los signos y síntomas de alarma en su embarazo, y en caso de necesitar, desarrollar un plan de seguridad para su atención adecuada.