La falta de agua en la capital potosina la cual se intensificará por la sequía de la Presa San José, podría recrudecer la violencia en San Luis Potosí, reconoció Jonathan Abraham Quintero García presidente del Consejo Hídrico Estatal.  “La violencia en torno al agua, precisamente es resultado de la desesperación y la lucha por el agua”. Justo esta violencia podría recrudecerse en la zona norte de la capital, que es donde diversos estudios han detectado que estas colonias son las más afectadas: “Podemos ver que las zonas más afectadas regularmente se encuentran al norte de la ciudad, hay otros sectores dispersos, pero la mancha urbana más afectada siempre ha sido el norte que son los grupos más vulnerables”. El especialista abundó que la desigualdad hídrica también se debe al modelo urbano que se tiene bajo un esquema de alta desigualdad y alta polarización.  Esta desigualdad hídrica es principalmente identificable en los sectores populares y de clase trabajadora. Otro problema que también se ha detectado, es la falta de vinculación del agua con los reglamentos urbanos y de ordenamiento urbano, el cual también es “altamente insostenible”. Una de las propuestas del CHE, es precisamente que se logre vincular el reglamento de agua con los planes de desarrollo y ordenamiento territorial, al menos de la zona metropolitana de San Luis Potosí.