El cierre que se dio en la convocatoria para el relevo de Juan Francisco Aguilar en la dirigencia estatal del PAN fue limitado a mujeres, nada más. De ahí entonces que algunas de las luminarias de este partido hayan levantado la mano, a saber. Por un lado las que podrían conformar el bloque antiazuarista: Josefina Salazar Báez, exdiputada local, Wendy Rodríguez Galarza, exdirigente municipal en Soledad de Graciano Sánchez, Teté Cárdenas y la de tradición, Lidia Argüello Acosta. Y por otro, la que jugará su ficha por parte del grupo de Xavier Azuara, la ex regidora Verónica Rodríguez. Todas, como mujeres, bien vistas dentro de la escena blanquiazul. Inteligentes, capaces, de voz, panistas de cepa y formación. Pero con cuadros políticos de origen distantes y distintos El día de hoy celebrara una “encerrona” las primeras cuatro, las del bloque antiazuarista, con el fin de decidir una candidata de unidad que le haga frente a Verónica, la que ira por su cuenta y con el apoyo del grupo que tiene encerrado al PAN, el del diputado federal Xavier Azuara. Todas ellas con credenciales y talento, trayectoria y panismo sin macula, salvo lo que les pueda manchar. Que es entregarse al nombre de quien les apoya para cumplir con los intereses personales y de caprichos que no han hecho más que enterrar, en este caso, al blanquiazul. Así sin más. Del humo blanco que salga de esta reunión, se verá entonces la unidad que busca el PAN.  O seguir en la misma y morir. Hasta el lunes…