Aún y después de la embestida que recibiera el Alcalde capitalino, Enrique Galindo, de parte del Gobernador del Estado, Ricardo Gallardo, por el tema y manejo del Plan Emergente Capitalino, cuyo objetivo del gobierno municipal es dar solución a la crisis que empezó a afectar a más de 100 colonias de la ciudad capital por la falta de agua que les surtía la Presa El Realito, las y los representantes de la marca PRI legislativa se quedaron como han estado desde septiembre de 2021: sin voz ni cara. Escondidos. Los señalamientos oficiales vinieron también de diputados y la alcaldesa soledense, Leonor Noyola, cuestionando “la transparencia del gasto en el Plan “galindista”.

A lo del viernes, Galindo mismo respondió con un video ese día por la tarde y con una rueda de prensa ayer al medio día explicando a detalle con fechas y señales la estrategia. Y a esto entonces ¿que hubiera esperado Galindo de parte de los diputados tricolores contra los cuestionamientos “verdes” que salieron del mismo edificio de Vallejo?.

Mínimo un saludo. Mínimo.

Replicar sería mucho pedirles. Ni Alejandro Leal, ni Edmundo Torrescano y ni Yolanda Cepeda tuvieron el compañerismo de Partido (de amistad no sabemos) para tomar una pluma, un papel y firmar o salir a medios con un pronunciamiento personal que tratara de mitigar el ataque oficial y defender a quien, en publico y primero, le dicen “amigo” y, segundo y de todos sabido, a quien representa el único timón que rescató el naufragio del PRI potosino que los citados dejaron que se hundiera cuando, estando en sus manos, lo echaron a la mar y hoy, inclusive, a los tiburones. Se limitaron -como han estado desde aquel septiembre de 2021- a publicar y sin firma, vía redes sociales a nombre del “Grupo Parlamentario del PRI”, un posicionamiento hasta ayer por la tarde: 72 horas después. Alejandro, Edmundo y Yolanda que bueno que no son ajustadores de seguros. (Y mediaticamente, un texto colectivo y sin nombre ni apellido que lo sostenga, esto y nada es lo mismo).