Pese a que el arrendamiento del hospedaje para los jornaleros en la comunidad Río Florido de Fresnillo resulta redituable, los habitantes han optado por convertir sus propiedades en locales comerciales y con ello, disminuyó la oferta de espacios para su estancia. Hasta el conteo más reciente, llegaron alrededor de 2 mil 400 trabajadores agrícolas a la comunidad en semanas recientes. El subdelegado de la comunidad, Christian Méndez López, afirmó que esta cifra es alrededor del 60% de la cantidad de jornaleros que se esperan para la próxima temporada de la cosecha. Explicó que desde hace tres años se limitó el permiso para que se utilizaran bodegas y túneles de secadoras de chile como espacios para el alojamiento de los jornaleros, lo que limitó aún más la oferta de espacios para su estancia. Consideró que lo complicado es la llegada de trabajadores agrícolas nuevos a las comunidades, pues los que tienen más años ya tienen contacto directo con los arrendadores y aseguran su lugar en las viviendas disponibles. Méndez López dijo que la mayoría de las personas que ya llegaron a la comunidad provienen de los municipios de Durango, pero se espera la asistencia de otros más provenientes de Guerrero, quienes resultan más problemáticos. Por este motivo, refirió que algunos de los arrendadores optaron por cambiar sus viviendas a locales comerciales y rentarlos, para evitar lidiar con ellos. El gobierno local tiene un registro de 214 viviendas asignadas para la estancia de los jornaleros agrícolas y alrededor de 170, ya están ocupadas. El subdelegado expuso que otros más optan por irse a comunidades vecinas como Bañuelos, Colonia Morelos, San Ignacio y San Gabriel.