La violencia en Valparaíso ha disminuido de manera consistente, y no por la capacidad de reacción y prevención de las autoridades de los tres niveles de gobierno, sino porque después de los meses de disputa que han mantenido grupos delictivos, ya uno de ellos, parece que ha dominado el territorio y se ha quedado al frente de “la plaza”. Las cosas violentas han disminuido, incluso ahora el ánimo social cambia entre la población de la cabecera municipal y de muy diversas comunidades a donde van regresando después de mucho tiempo en el que se vieron obligados a dejar sus viviendas y propiedades, además de sus animales y muchos de sus recuerdos. Ha sido tal la situación, que ya hasta el propio alcalde Eleuterio Ramos Leal, aseguró que la seguridad en el municipio ha mejorado, situación en la que han influido las corporaciones, no obstante, tuvo mucho que ver que un grupo delincuencial “venció” a otro y lo desplazó del territorio, lo que ha permitido también que más de la mitad de las familias que se vieron desplazadas estén regresando a sus hogares.  De la misma manera, el abogado y virtual candidato a diputado local en lo que sería un nuevo distrito electoral local, ha venido señalando que se ha avanzado positivamente en materia de seguridad luego de que el municipio tuvo muchas escenas de cruenta violencia. Parece que hoy la tensión se ha reducido y sólo resta confiar en que la ruta de mejora permanezca, pues ya no hay enfrentamientos entre grupos y ahora la violencia se ha desplazado a otros territorios. Ojalá que no regrese a Valparaíso y también se vaya a del Estado.  En ese sentido tiene mucho que ver que un grupo delincuencial venció a otro y lo desplazó del territorio, es una de las circunstancias, quizá la más importante, habida cuenta que al existir sólo un grupo, la situación tiende a “normalizarse” y las personas vuelven a tratar de reencontrar su vida. No se puede soslayar que después de los enfrentamientos y que un grupo ha vencido al otro, ya existe también una presencia permanente del Ejército, de la Guardia Nacional, de las corporaciones estatales, esperando que ellos, no sean blanco del grupo que ha pasado a ser el dominante en la región, según lo dicen los pobladores. Esto también permite que los habitantes desplazados estén regresando a sus casas, porque más de 100 familias que se habían movilizado, están regresando, y ya son menos de la mitad las que permanecen lejos de sus casas y comunidades, están regresando de manera intermitente. Ahora el gran reto es que las familias puedan  regresar a sus casas y comenzar con el proceso de recomposición familiar y comunitaria ya que sus viviendas fueron saqueadas, las comunidades están sin servicios y existe aún temor de que vuelvan a suceder los actos de violencia. Los grupos criminales son grupos fortalecidos y con mucha capacidad de movilización, con recursos económicos, recursos humanos y armamento, que difícilmente renuncian al control territorial y eso es lo que ha perjudicado al municipio.  Ahora que las autoridades están presentes, hay destacamento del Ejército y de la Guardia Nacional y esa presencia permanente es la que ha mantenido la tranquilidad en algunas regiones de Valparaíso, por lo que el temor no es porque falten las corporaciones, sino respecto a la actuación de los grupos delincuenciales. Ha vencido uno de ellos.