En la Rotonda de las personas ilustres, del Panteón Dolores, el Gobierno de Zacatecas recordó y honró la vida y obra del Poeta de la Patria, Ramón López Velarde, en un acto que se ha convertido en habitual cada junio, en la conmemoración de su nacimiento y muerte.   En un acto que hoy ocupó a un grupo de zacatecanos y funcionarios de cultura en el país, en torno a la figura del autor de El Minutero, la Directora de Instituto Zacatecano de Cultura, María de Jesús Muñoz Reyes, en representación del Gobernador David Monreal Ávila, dijo que para este gobierno es prioritario reconocer a quienes, con su vida y obra, han dado renombre al estado.   Muñoz Reyes trajo a la memoria de los asistentes que, el recuerdo de la infancia, el encuentro con la Ciudad de México, la nostalgia del amor perdido y sus conflictos religiosos, son temas recurrentes en la obra velardeana; sin embargo, sus crónicas y otros textos en prosa revelan un interés que por mucho rebasa el ámbito del terruño para ir hacia cuestiones más apremiantes del siglo XX.   Habló también de las actividades que se realizarán en homenaje al poeta durante la semana que comienza, tanto en Zacatecas como en Jerez, en el marco de las Jornadas Lopezvelardeanas, edición XXVI, donde se entregará el Premio Iberoamericano “Ramón López Velarde” a Nuno Júdice, quien es actualmente uno de los poetas más importantes de Portugal, ensayista y novelista.   Antes, María del Carmen Férez Kuri, directora de la Fundación Casa del Poeta, última morada de Ramón López Velarde, recordó que López Velarde no ha dejado de convidar a los lectores la pasión de sus numerosos enigmas. “Su obra, sigue sumando ensayos literarios, tesis académicas, novelas y poemas, donde se busca analizar, interpretar y recrear las claves únicas del autor de la Suave Patria”.   Dijo que su obra, patrimonio intangible de la cultura en México, goza de una compañía ejemplar en la última morada física del jerezano, la casa del poeta Ramón López Velarde; que, aunque se desconoce la fecha de construcción del inmueble, sus características hacen ubicarlo como edificado en el Porfiriato.   Férez Kuri habló de este edificio donde el poeta vivió los tres últimos años de su vida, de 1919 a 1921, y que hoy es concebido para rendir un homenaje en memoria de López Velarde, con la instalación de un museo en el sitio donde pudo haber sido su recámara y su estudio, así como datos sobre cómo vivió, y donde los museógrafos trataron de rescatar un ambiente que, aunque pobre, trajo a una familia que había conocido tiempos mejores en su originario Jerez, Zacatecas.   Es muy probable que López Velarde se desenvolviera en un ambiente semejante, en donde se ubican muebles y cosas de la madre y las hermanas, quienes tejieron y bordaron los objetos de uso personal.   Con la fundación de la casa en 1992, dijo, se consagró el último deseo de López Velarde, tal como este lo manifestó en un escrito fechado en 1913:    “Anhelo algo que no se comparece con la sinceridad de mi pesimismo, la edificación de una casa, de mi casa, una casa como un retiro fragante y silencioso, contra cuyos muros vendría agonizar la agitación bárbara de las multitudes como las olas que mueren en la arena. Cómo está rotonda de las personas ilustres y claro está, cómo la naturaleza misma de la poesía, la casa del poeta los espera con las puertas y brazos abiertos en su retiro fragante y silencioso”.   Víctor Hugo Huizar Iturriaga, director del Instituto Jerezano de Cultura, dijo que en el 135 aniversario de su nacimiento y el 102 del aniversario de su muerte, los zacatecanos y los habitantes de la Ciudad de México recuerdan el legado del poeta nacido en Jerez y su impacto en la literatura mexicana, quien se convirtió en una figura emblemática de la poesía mexicana del siglo XX.   De esta manera, flanqueado por las tumbas de Santos Degollado, José María Luis Mora y Antonio Caso, y donde también se encuentran los restos del zacatecano Manuel M. Ponce, fue montada una guardia en honor, en el inicio de las 26 Jornadas Lopezvelardeanas 2023.