El Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) prepara operativos contra la piratería en Tepito, San Juan de Dios en Guadalajara y La Pulga en Monterrey, tres de los principales focos de distribución de mercancía apócrifa en México, así lo informó Santiago Nieto, titular del IMPI.

Además, detalló que estas acciones forman parte de los compromisos internacionales del país en materia de protección a la propiedad intelectual.

“Dentro del diagnóstico que tenemos respecto a la piratería en México hay 19 mercados famosos, así se les conoce. Uno es Tepito, San Juan de Dios en Guadalajara, tenemos también en Monterrey, en La Pulga”, explicó.

En respuesta a la pregunta sobre por qué aún no se han realizado operativos en Tepito, Nieto reconoció que se trata de un “tema pendiente” y que ya se está trabajando con autoridades locales para intervenir estas zonas.

“El inicio de la operación limpieza fue en esa Izazaga 89, en la zona del Centro Histórico de la Ciudad de México, pero evidentemente es otro de los espacios que tendremos que ir. No doy más datos para no estar alertando a las personas que están generando este tipo de conductas”, afirmó.

IMPI destruye miles de juguetes piratas de China

Además de los operativos, el IMPI informó que este jueves destruyó 10 mil unidades de juguetes piratas importados desde China, copias del diseño industrial registrado por Lego. El aseguramiento se realizó en la aduana de Lázaro Cárdenas mediante el procedimiento Medidas sin Frontera.

“Se trata de un procedimiento que se llama Medidas sin Frontera. Los titulares de los derechos pueden presentar una denuncia ante el IMPI y el IMPI acudir a las aduanas de México, en este caso fue la marca Lego la que solicitó dos procedimientos”, explicó Nieto.

Aunque los juguetes no usaban el logo original, replicaban el diseño protegido por derechos de propiedad industrial. “Esta empresa china lo que hizo fue duplicarlas y la piratearon para hacer sus productos”, señaló.

¿Qué sanciones existen por distribuir piratería?

El funcionario subrayó que quienes distribuyen mercancía apócrifa enfrentan sanciones administrativas, fiscales y penales. “Nosotros imponemos una multa que puede convertirse incluso en un crédito fiscal. Por otro lado, hay una responsabilidad de naturaleza penal. Evidentemente, evasión fiscal, puede tratarse de casos de defraudación fiscal”.

Agregó que muchas de estas empresas son fachadas, lo que complica su localización.

“Son empresas que dan un domicilio fiscal y después resulta que ya no se encuentran en ese espacio”, apuntó

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Los operativos del IMPI buscan reforzar el cumplimiento del T-MEC y otros acuerdos internacionales en materia de propiedad intelectual.

Con información de El Financiero