Casi todo el segundo semestre del 2023, ha sido complicado para el sector restaurantero de San Luis Potosí, de julio a octubre hubo una fuerte caída en las ventas, señaló Eduardo Kassis Chevaile presidente local de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac). Este “tropiezo terrible” es resultado de factores como la incertidumbre que hay en torno a los ordenamientos de la legislación, la falta de apoyos económicos a las unidades económicas y a los emprendedores, carencia de mano de obra y alza a los insumos alimenticios, producto de la inflación. Reiteró que los lácteos superaron el incremento del 50 por ciento, la carne de res tenía un aumento del 52% al iniciar el año y ahora está cerrando con un 65% adicional: “La inflación en el sector económico ha sido muy alta, la regulación se ha incrementado de manera exponencial lo que nos obliga a hacer inversiones y a generar gastos que no se tenían previstos”. Además de que no ha habido tiempos de oxigenación en el que puedan recuperarse: “te piden que hagas inversiones de carácter inmediato, en cantidades muy importantes, que si bien, estamos de acuerdo que la ley lo exige, también estamos conscientes que no todos los contribuyentes cumplen”.  Se espera que diciembre sea de recuperación para el sector y que se logre llegar a las utilidades que se consiguieron durante el 2019, año previo a la pandemia. “Para nosotros 2019 fue el mejor año, viene la pandemia, causó un gran conflicto y la quiebra de muchísimas empresas, ahora con esto prácticamente esperamos estar por encima del 2019”.