La presidenta del Supremo Tribunal de Justicia del Estado, Lourdes Anahí Zarazúa, reconoció que los juicios en materia familiar y penal son actualmente los que presentan el mayor rezago en San Luis Potosí, situación que se explica por el alto número de ingresos de asuntos y la insuficiencia de secretarios de acuerdos para dar seguimiento oportuno a los expedientes.

La magistrada explicó que el juzgado con mayor carga de trabajo es el de la capital potosina, al atender a la población más numerosa del estado, aunque señaló que el juzgado de Ciudad Valles también registra un volumen considerable de carpetas, principalmente en materia penal y familiar, lo que ha generado saturación en ambos distritos judiciales.

De acuerdo con estimaciones internas del Poder Judicial, en materia familiar una persona puede esperar en promedio entre 8 meses y más de un año para que su asunto avance de manera sustancial hacia una resolución, mientras que en casos penales el tiempo para que una carpeta llegue a la etapa de juicio puede oscilar entre 6 y 12 meses, dependiendo de la complejidad del caso y de la disponibilidad de personal jurisdiccional.

Según datos oficiales del Censo Nacional de Impartición de Justicia Federal y Estatal 2024 del INEGI, de los 42 mil 184 asuntos ingresados en órganos jurisdiccionales de primera instancia, 19,338 permanecieron sin concluir al cierre del ejercicio, lo que equivale a aproximadamente 46% de los casos en trámite, una proporción significativa del total que aún no ha sido judicializada. Asimismo, en materia penal la sobrecarga también es notable: en 2024 el Supremo Tribunal de Justicia del Estado recibió 4,835 causas penales nuevas, pero cerró el año con 5,528 expedientes pendientes, lo que refleja que solo una fracción mínima de casos ha sido resuelta en tiempo razonable, mientras el resto continúa en espera de sentencia o resolución final.  

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La presidenta del STJE reiteró que la carencia de secretarios de acuerdos es uno de los principales cuellos de botella del sistema, ya que estos funcionarios son clave para el seguimiento procesal de los casos. Sin su intervención, explicó, los juzgados ven limitada su capacidad para avanzar en los tiempos legales establecidos.