En el Manchester City hay ilusión de eliminar al Real Madrid en la vuelta de las semifinales de la Champions League y para el partido de vuelta esperan poner sus nombres "en los libros de historia", aunque auguran una “batalla contra Vinícius”, así lo manifestó el defensa Kyle Walker. "Hemos tenido momentos duros y momentos buenos. Esta es la guinda del pastel, si tenemos suerte pondremos nuestros nombres en los libros de historia", declaró, recordando la final perdida en 2021. "Me hubiera gustado ganar al Chelsea. Este grupo de jugadores es lo suficientemente bueno, hemos superado muchas situaciones. Recuerdo que contra el Tottenham, pensamos que Agüero había marcado y estábamos clasificados", rememoró. Además, insistió en que el de este miércoles "es un partido grande para el vestidor" y que esta es "una semana enorme para el club". "Nos encontramos en una buena situación comparado con hace un par de meses, sobre todo en Premier. Ir al Bernabéu y traernos un 1-1 al Etihad nos hace estar más que seguros de conseguir un buen resultado. Ojalá podamos hacerlo de nuevo", indicó. "Al club le falta esto -la Champions-, se lo debemos a los dueños por la cantidad de dinero que han invertido. Tenemos un rival difícil mañana para llegar a la final. Es una final, puede pasar cualquier cosa. Y Milán e Inter son clubes enormes, veremos ese partido y lo estudiaremos mucho, pero lo primero es llegar a la final", advirtió. "Hay una línea muy fina entre perder o ganar. Con este grupo, nada ha terminado. Bromeábamos con Gundo -Gundogan- diciendo que se convierte en Zidane en los últimos meses. Son ganadores natos", bromeó. En otro orden de cosas, el zaguero inglés prevé "una gran batalla contra Vinícius". "Me lo tomo como cualquier otro partido, hay que mostrarle respeto, como con Mbappé en el Mundial. Estoy representando al City, la ambición del club es enorme. Si no puedo competir contra los mejores jugadores, no debería estar aquí", señaló.   "Es un muy buen jugador, hace lo que necesita su equipo para ganar partidos. No me meto en todo eso, si se mete conmigo no me molesta. He pasado por cosas más difíciles. Es un jugador 'top'", afirmó, antes de hablar de su abrazo con él tras el partido de ida. "Le dije que no me hiciese una 'bicicleta' porque me iba a convertir en 'meme'. Los boxeadores se pelean y se dan la mano después, es el nivel de respeto que se merecen", expuso. Por último, valoró su etapa fuera del once. "Tengo que reaccionar de manera profesional, es mi entrenador, aunque haya cosas con las que no está de acuerdo. Le agradezco lo que ha hecho por mí, por el City, me ha cambiado la carrera. Por supuesto que duele, empiezas a dudar de ti mismo. Tienes que volver a lo básico, en lo que eres bueno, y demostrar que está equivocado", concluyó. FUENTE: EXCÉLSIOR