“Respiro y escribo”. Así definió ayer Miguel Bosé la faceta de escritor que ha hecho pública a raíz de la divulgación de su libro El hijo del capitán Trueno y, ahora, con Historia secreta de mis mejores canciones, que hoy presenta en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara. En rueda de prensa, confesó que “mucho antes de empezar a cantar y a hacer música, he escrito; y escribo todos los días de mi vida. Respiro y escribo. A veces poco, a veces mucho, pero siempre escribo”. Alegre, atento y risueño, Bosé, quien considera que la inspiración es un misterio y que puede llegar de cualquier lado, se definió como un revolucionario cuando le pidieron que se definiera. “Es una pregunta de vértigo. Cuando ves los comienzos de Bosé, están hoy superados; pero, en tiempos de la dictadura, destacaba esa naturalidad del chico que aún no tenía ídolos, que cantaba y vestía de otra manera. En ese momento fue muy revolucionario”. Señaló que Historia secreta... es “un libro que tenía prometido a todos mis fans que, al mismo tiempo que no querían conocer los misterios de cada canción, se morían por saberlos. Van a tener un conflicto muy grande al descubrir la historia de cada pieza, y deben decidir si se quedan con lo que fue para ellos o se entregan a lo nuevo. Pido a los lectores que, a pesar de que encuentren la verdadera historia de cada canción, conserven lo que sintieron cuando la escucharon por primera vez y la hicieron suya”.

Explicó que seleccionó sólo las canciones de su autoría. “Ese fue el primer filtro. Y el segundo es que estuvieran las que tenían que estar, los éxitos, las que son universales”. Destacó que fue agradable remontarse al pasado. “Si no hubiese estado en paz con mi pasado, jamás hubiera podido regresar a mis canciones. Además, hay un tiempo en la vida en que hay que dejar ir, soltar, liberar; y es la mejor manera de agradecer a lo que ha contribuido a hacerte grande. Hay que dejarlas partir y dar las gracias”, concluyó.

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Con información de Excélsior