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La imagen del doctor está ahí porque defendió siempre “la libertad y la democracia”.
23:31 sábado 14 mayo, 2022
ColaboradoresEl próximo miércoles 18 de mayo se cumplirán treinta años del fallecimiento de Salvador Nava Martínez. El doctor, fue un luchador social entregado por completo a las causas del pueblo. Lideró el anhelo de miles de potosinas y potosinos que aspiraban vivir una verdadera democracia. Fue un hombre honesto comprometido con la gente. Colocó la dignidad de la persona como virtud esencial en la actividad política y en el servicio público. Hacer política y gobernar con y para el pueblo, estuvo en el centro de su ideario.
Dos veces presidente municipal de la capital, el doctor demostró que con un apoyo popular genuino, era posible derrotar al PRI y al gobierno estatal con todo y su maquinaria fraudulenta. También fue candidato a la gubernatura en dos ocasiones y en ambas, fue víctima de fraude. En su trayectoria por demás brillante, tumbó a dos gobernadores: Manuel Álvarez y Fausto Zapata Loredo. Con ello, venció al cacique Gonzalo N. Santos y luego, al todopoderoso Carlos Salinas de Gortari. Pero esas victorias no habrían sido sin el acompañamiento de la gente. La fuerza del doctor radicaba en el respaldo popular. Nava Martínez fue sin duda, el dirigente ciudadano más importante en la historia de San Luis Potosí, sería mezquino no reconocerlo. Le tocó vivir tiempos difíciles. Había un régimen autoritario bajo el dominio presidencial de un partido hegemónico: el Revolucionario Institucional. No existía la separación de poderes, el PRI gobernaba todas las entidades federativas, no había organismos electorales independientes y autónomos; el gobierno organizaba los procesos electorales. El centralismo en la figura presidencial era aplastante, había un remedo de democracia. Salvador Nava fue contra ese sistema político y le hizo suficientes hoyos como para dejarlo tambaleante. Resultado de su lucha contra el fraude en las elecciones de 1991, se sentaron las bases para la ciudadanización de los órganos electorales a nivel local y federal. Transición a la democracia, fue bandera que siguieron muchos en San Luis Potosí y todo el país donde la gente ya estaba harta del régimen priísta. Alternancia en el poder, era la exigencia. Transición y alternancia de la mano del pueblo; elecciones libres y limpias en las que el voto fuese respetado, gobiernos democráticos cuyo único objetivo fuera el de servir con honestidad a la gente; autoridades legítimas que nunca más violentasen la dignidad de las y los ciudadanos. Hace treinta años eso parecía imposible, pero con el ejemplo de la lucha potosina, México inició un proceso democratizador que no se ha detenido. Con su muerte, nació la consigna “Nava vive, la lucha sigue”. Su legado está a la vista de todos. En la sala “Daniel Cabrera y los olvidados”, en palacio nacional, hay fotografías de algunos de los luchadores sociales más importantes en la historia contemporánea de México. Las colocaron por órdenes del presidente, Andrés Manuel López Obrador quien en múltiples ocasiones ha expresado su admiración y reconocimiento al doctor Nava. La imagen del doctor está ahí porque defendió siempre “la libertad y la democracia”.
“Era un hombre extraordinario que no quiso la concertacesión que le propusieron de manera indecorosa”, recordó el presidente. Lecciones como esas deberían estar presentes hoy. Lamentablemente, la clase política potosina no evolucionó gran cosa durante las últimas tres décadas; nadie aprendió del ejemplo del doctor. Política y ejercicio de gobierno distantes de la voluntad popular. A la gente, se le manipula o se le compra su lealtad con dádivas y con ello, pasan a diario por encima de su dignidad, ese alto valor que defendía Nava Martínez. Hacer política y gobernar para el pueblo es algo que tanta falta hace en San Luis Potosí, donde la dignidad de las y los ciudadanos es un asunto menor.