Violencia por parte de los niños representa un desequilibrio familiar y es resultado de un hogar disfuncional, lamentó el vocero de la Arquidiócesis de San Luis Potosí Tomás Cruz Perales. Tras el asesinato de un niño de 11 años en el estado de Veracruz a manos de otro niño de 10 años por supuestamente haberle “ganado en las maquinitas”, el vocero religioso dijo que estos escalofriantes incidentes son resultados de una pérdida de valores. Ejemplificó que el caso del tiroteo en Monterrey en un colegio en 2017, donde una maestra de secundaria perdió la vida tras ser impactada con una bala emitida de una pistola manipulada por un joven de 15 años, ha sido uno de los acontecimientos más brutales en la historia de México y de la descomposición social que permea desde hace años. Declaró que estos incidentes no únicamente ocurren en México, sino en otras latitudes, ya que recordó noticias en las que hay un niño que asesinó a sus padres porque le quitan el teléfono celular. Cruz Perales externó que las niñas y niños merecen sentirse queridos, escuchados y atendidos, por lo que llamó a los padres a no “abandonarlos”. Agregó que es tiempo de reforzar sus valores, en el que los padres y madres de familia se deben de involucrar aún más en la crianza y en conocer porque situaciones están pasando los menores de edad.