Expertos del sector energético comparan la reforma eléctrica del 2013 con la nueva iniciativa del 2022, y explican lo que ésta ofrece. El proyecto de reforma eléctrica del ejecutivo ha suscitado diversas opiniones dentro y fuera del poder legislativo. Expertos, académicos y asesores privados opinan sobre lo que ofrece esta propuesta para el sector energético mexicano y su diferencia con lo que prometía la reforma de 2013. ¿Qué planteaba la reforma eléctrica de 2013? “La reforma de 2013 una de las cuestiones que crea es un mercado eléctrico mayorista, lo que se decidió fue crear un mercado eléctrico que permitiera democratizar los costos bajos de la electricidad, es decir, que todos pudiéramos tener acceso a energía más barata, no solamente las grandes empresas sino que también la Comisión Federal Electricidad (CFE) pudiera ir al mercado y comprar energía más barata, ya afuera que la produjera la propia Comisión Federal de Electricidad o un privado”. … explicó Lourdes Melgar, consejera fundadora de Voz Experta y subsecretaria de Electricidad y de Hidrocarburos de México entre 2012 y 2016. “Previo a la reforma la participación de los actores privados se daba mediante esquemas limitados. Estaban por un lado los Productores Independientes de Energía que vienen de la apertura que se dio en 1992, justamente para permitir a los privados generar energía eléctrica para venderle a la CFE. Por otro lado, la reforma que se dio a la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica permitía crear las sociedades de autoabasto, que eran esquemas donde uno ponía una planta para generar, para consumo propio”.

… añadió. Horacio Sánchez, de la Escuela Superior de Economía del Instituto Politécnico Nacional habló sobre esta sociedades de autoabastecimiento: “Los Productores Independientes de Energía y las sociedades de autoabastecimiento, bueno, pues este esquema conforme fue pasando el tiempo se fue distorsionado en pocas empresas energéticas. En esta distorsión, lo que vimos fue que fue incrementando la concentración”. Por su parte, Fluvio Ruíz , analista del sector energético explicó que hay quienes han hecho uso correcto de estas sociedades de autoabasto: “Se trata de la energía que producen algunas empresas para otros procesos industriales y utilizan remanentes o agregan más capacidad calorífica para también generar su electricidad. Hay una estimación: aproximadamente el 20% de la generación del país tiene que ver con esta figura y pues dependiendo de cómo se le analice, hay quienes piensan que más o menos la mitad, 60%, caería digamos en esta especie de simulación que tendría que ser corregida” Situación del mercado de la energía eléctrica en México

Nicolás Domínguez, de la División de Ciencias e Ingeniería en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), se refirió a la situación actual de los permisos en el mercado eléctrico. “Existen 239 permisos para que las compañías tengan sus propias centrales y produzcan su electricidad. Entonces estos 239 permisos se usan para venderle electricidad a 77 mil compañías. Pero aparte de que cobran por vender esa luz y no pagan impuestos, resulta que no pagan por la transmisión, a pesar de que la CFE es la que tiene esas líneas, mantiene esas líneas. (…) La reforma de 2013 lo que trató de hacer es que entraran los privados. Este esquema se ha usado en todo el mundo: fracciona tu CFE, pártela en cachitos; y si la partes en cachitos, pues ya no va a ser tan buena porque sus mismas unidades van a tener que competir. Por este esquema la CFE deja de vender el 45% de electricidad que puede producir, y al hacerlo pierde 215 mil millones de pesos, pero aparte existe otra cosa, la CFE le tiene que vender a otra parte de la CFE que se llama de Suministro Básico. Como no le dejan vender esta electricidad tiene que comprarla y la compra por 223 mil millones de pesos, así que la CFE está perdiendo en eso ¿cuánto? Pues está perdiendo más de 400 mil millones de pesos por esos Certificados de Energía Limpia que se le regalan a los privados; está perdiendo 6 mil millones de pesos que en 20 años serán 100 mil millones de pesos por esos regalos”. Luca Ferrari, del Centro de Geociencias de la UNAM, profundizó al respecto: “Yo como privado pongo un parque solar y pues ofrezco un precio. Despacho primero la electricidad, pero al final del día, cuando se hacen las cuentas, lo que se me paga es el precio marginal más alto. Entonces es un gran negocio. Pero sin embargo, yo no tengo que cargar con los costos asociados a la variabilidad, a la intermitencia de la generación solar, por ejemplo, o eólica. Estos costos los carga CFE”. En contraparte, Eduardo López, de la Central Eólica “El Mezquite” habló sobre estas “intermitencias”: “Es importante mencionar que la energía que nosotros generamos es de forma variable, es decir, no siempre generamos la misma cantidad de energía, pero sí queremos desmitificar el hecho de que somos intermitentes (…) Nosotros trabajamos en función de la velocidad del viento y podemos anticipar, hasta con 10 días, cuánto viento vamos a tener el siguiente día, la siguiente hora y cuánto vamos a generar”. ¿Qué propone la reforma eléctrica de 2022?

Para Fluvio Ruíz, analista del sector energético, la reforma eléctrica de 2022 busca revertir la parte esencial de la reforma de 2013. “El punto más relevante, desde mi perspectiva, de esta reforma, es que vuelve a incluir a todo el suministro eléctrico, desde la generación, la conducción, el transporte, el abastecimiento y la distribución en el listado de actividades del Artículo 28 constitucional, en las cuales, cuando el Estado ejerce funciones de manera exclusiva, no se consideran monopolios. (…) Con la reforma de 2013-2014, la transición energética estaba más bien sujeta a las oportunidades de negocio propias del mercado y no había una clara responsabilidad estatal. Con esta iniciativa se adiciona un párrafo al Artículo 27 y ahí claramente se establece que el Estado tendrá la responsabilidad de la transición y que eso implica además la instauración de una política industrial, científica y tecnológica para apuntalar esta transición”. En ese sentido, Gonzalo Monroy, de la consultora GMEC, habló sobre la cancelación de los permisos y contratos vigentes que tendrán lugar con la reforma eléctrica de 2022. “Con la reforma que ha planteado el presidente López Obrador se cancelan todos los permisos y contratos vigentes. Lo que se busca es que CFE sea el único comprador de la energía privada, ese famoso 46%. Pero hay que entender claramente: una planta, por ejemplo, de autoabastecimiento, que podía vender la energía entre los socios que pusieron la propia planta o que consumen de esa planta, lo que ahí está diciendo es que aunque tú hayas hecho esa inversión, tú ya no podrás recibir la energía que tú construiste y que tú generas. Hoy se la vas a tener que comprar a la CFE. Una CFE que te puede decir ‘a ti te compro y a ti no’. ‘Te voy a comprar a tal precio y, si no te gusta, no tienes a nadie más a quien venderle la energía’. Y tampoco ni siquiera puedes consumirla”. Para Gabriela Siller, del Departamento de Economía del Tecnológico de Monterrey si esta reforma eléctrica pasa como está “se quedaría solamente la CFE y entonces volvería a ser un monopolio como era antes, nada más que enfrentando ahora una mayor demanda porque la población ha crecido significativamente. Las empresas con todo el crecimiento económico que se ha dado cada vez demandan una mayor energía eléctrica que además ahorita, bueno, pues algunas se autoabastecen y esto podría llevar por apagones”. “Cuando no existe una planeación obviamente pues va a haber apagones. Entonces se va a culpar a la compañía eléctrica del Estado que se destruyera esa planeación. Porque ahorita, por ejemplo, lo que estas empresas dicen es ‘pues vamos a generar aquí, vamos a generar allá’. ¿Quién tiene que hacer todo el trabajo de este control, de que estas líneas de transmisión no se sobrecarguen? La CFE”. … dijo Nicolás Domínguez. “El futuro en nuestro país de estas energías, en general, de toda la matriz que tenemos, se ve bastante promisorio y vamos a poder solventar el crecimiento que se siga dando. Y, bueno, seguramente las energías intermitentes también van a contribuir, pero debemos de seguir con el control de las mismas de una manera ordenada porque todo implica un reto para nosotros en la operación del sistema”. … concluyó Javier Sotelo, del Centro Nacional de Energía. --

Con información de Noticieros Televisa /