Los primeros cien días son un símbolo para muchos gobernantes. Digamos que es una primera escala en la ruta se trazaron y momento para corregir detalles. En el caso de Samuel García, el más joven y mediático de los gobernadores recién llegados al cargo, los primeros cien días pasaron desapercibidos. Llegó a esa fecha simbólica con tres crisis a punto de estallar. La sanitaria, en el peor momento de contagios de toda la pandemia de coronavirus y las hospitalizaciones a la alza. La inminente escasez de agua potable para la zona metropolitana de Monterrey. Y con el más alto nivel de homicidios en una década para Nuevo León. Además, a pesar de la amplísima exposición en redes sociales que tiene, su aprobación está, digamos, hacia la media tabla. Mitofsky lo coloca en lugar 12 (55.5%) y México Elige en lugar 14 (58%). Con la suficiencia que lo caracteriza, Samuel García afirma que las finanzas del estado van muy bien y que está trabajando para controlar la inseguridad. Con el presupuesto de mil 500 millones de pesos planea refundar la Fuerza Civil, reforzar el sistema de videovigilancia en la zona metropolitana de Monterrey, los destacamentos de seguridad carreteros, y todo lo que haga falta. Pero, eso sí, promete que Nuevo León será más seguro. La corrupción es uno de sus pendientes. Claro, es pronto aún, pero el mismo García denunció los primeros casos e implicados a dos días de haber tomado posesión. Como en campaña, sigue disparando sus críticas a su antecesor, pero ya comenzó a lavarse las manos. Ya pasó a los jueces la responsabilidad de vincular al Bronco a proceso. Como abogado debería saber que para que eso ocurra, su gobierno debe reunir las pruebas contundentes -que dice tener- e integrar bien los expedientes para que los jueces apliquen le ley. Samuel García asegura que en la transición detectó las bombas de tiempo que hoy enfrenta y que sabe cómo desactivarlas. Ya veremos. BON APPÉTIT

Ya que hablamos del ranking de los gobernadores, destaca Rubén Rocha Moya, de Sinaloa. México Elige lo coloca en primer lugar de aprobación, en diciembre de 2021, con 72.7 por ciento. Ni siquiera el presidente López Obrador ha logrado esos niveles de aceptación en sus tres años de gobierno. En la Ruta 2022, estamos a punto de saber quién será candidato o candidata de la alianza PAN-PRD en Quintana Roo. Compiten la senadora panista Mayuli Martínez, el empresario y actor, Roberto Palazuelos, y la diputada federal Laura Fernández Piña, quien acaba de renunciar al Partido Verde. Hay muchos que no creen esa renuncia, porque aseguran que Fernández Piña representa los intereses de Jorge Emilio González, el Niño Verde, y del exgobernador priista, Félix González Canto. En caso de que lo dejen fuera, Palazuelos amagó con apoyar a la senadora Marybel Villegas Canché, quien tal vez a esta hora ya haya roto con Morena para ser candidata de Movimiento Ciudadano. Cuestión de horas para conocer las definiciones. POR ALEJANDRO CACHO

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