Hace una semana ocurrió algo inédito: el allanamiento por parte del FBI a la residencia de un expresidente de Estados Unidos. ¿Qué andaban buscando los agentes en la residencia de Trump? Pues, de acuerdo a la orden de cateo: cualquier documento físico o evidencia de transmisión de información clasificada o top secret, con el objeto de levantarle cargos por violación a la Ley de Espionaje, la cual contempla hasta 5 años de cárcel por esos delitos, pero más importante, la inhabilitación para competir en elecciones futuras.

En efecto, el allanamiento no solo tiene que ver con la procuración de justicia, sino con el contexto electoral. Aun con todos los escándalos, el proceso judicial que lleva por ocultar sus declaraciones de impuestos y con la investigación que le sigue el Congreso por instigar a la violencia en el Capitolio el 6 de enero del 2021, Donald Trump sigue siendo el candidato mejor posicionado dentro del Partido Republicano.

Esto evidentemente ha levantado las alarmas entre varios sectores políticos porque Trump se ha inmunizado ante tanto ataque, y lo único que han conseguido es endurecer a su base. De hecho, una de las primeras cosas que hizo Trump después del allanamiento fue pedir donaciones. Y de acuerdo a su hijo, rompieron récord de contribuciones.

Pero también está el enfoque político. Biden había ganado su legado como el hombre que venció al fenómeno Trump y lo sacó de la Casa Blanca. No tenía que hacer otra cosa a lo largo de su mandato más que nadar de muertito y pasaría a la historia de esta manera. Pero, la inflación, el agradamiento de la influencia de China y Putin atacando Ucrania, le cambiaron el panorama. Ahora su país demanda un líder con pantalones, y para muchos ha quedado a deber. 

La baja aprobación de Biden evidentemente propicia el terreno para el regreso de Trump. Y estando a 3 meses de la elección de medio término, que pinta adversa para los Demócratas, se requieren otras medidas para desinflar la ola trumpista. Ahí el énfasis de lo técnico-jurídico. Si las autoridades hicieron un cateo es porque tenían certeza de que iban a encontrar algo que estaban buscando.

Y efecto, encontraron cosas como documentos clasificados, una carta de clemencia a Roger Stone, su exasesor, y un informe sobre Emmanuel Macron, presidente de Francia, lo cual es suficiente para formularle cargos y con ello bajarlo de la contienda. Pero al paso que van las cosas y con la efervescencia política que vive Estados Unidos, parece que solo hay dos salidas: o Trump termina en la cárcel o termina siendo reelecto presidente.

Israel Navarro es Estratega Político del Instituto de Artes y Oficios en Comunicación Estratégica. Twitter @navarroisrael