Ayer por la tarde noche la dirigencia nacional de Morena dio a conocer a las finalistas, cuyos nombres se disputarán “la bendición” final para ser la abanderada por Morena para la gubernatura de San Luis Potosí. Después de tantas semanas, que, si en política un minuto es eterno, imagínese mas de un mes desde que Delgado dio a conocer el cambio de convocatoria, para cerrarla a mujer. Las preguntas entre la población -no solo la militancia- y que tampoco hemos sabido de alguno, uno solo, al que le hayan preguntado, fueron 3: conocimiento de la persona, identificación morenista y si debe ser o no la candidata. Ayer por la tarde noche una de ellas, Lucy Lastras, compartió para este medio los resultados:

1. Mónica Rangel

2. Lucy Lastras

3. Francisca Aguilar

4. Paloma Aguilar ¿Qué falta entonces?

Pues como a la antigua. 

No era necesaria tanta pregunta o 18 aspirantes. 

No eran necesarias tantas encuestas o la participación masiva de un universo de 500 o 100 potosinos. 

Basta siempre una firma. Por lo pronto ayer mismo se tuvo la primera de ellas, que pensando mal y acertando, va dirigida a que la candidata ya tiene nombre y apellido.

Fue la firma de RECIBIDO en Palacio de Gobierno de la renuncia, ya separación definitiva, de su encargo como Secretaria de Salud del gobierno carrerista de Mónica Rangel. Si hay un cambio en la bitácora de viaje de la “4T” en San Luis, pudiera inclinarse la balanza a Lastras Martínez, Directora del Registro Civil carrerista también con licencia. En ambos casos, hasta esta hora, y de ser candidata y después gobernadora, Juan Manuel Carreras gana. Hasta ahora. Aun y con encuestas y resultados todo puede pasar. Si en Morena han pasado mas de un mes en la zozobra con tantos movimientos, que no pasen otros de “ahorita” a “en un minuto”… Nada está escrito. Hasta mañana…