Septiembre dejó una herida que tardará más de lo esperado en sanar para Saúl Canelo Álvarez. No se trata sólo de la tercera derrota de su carrera ni de haber entregado sus cinturones de campeón mundial supermediano a manos de Terence Crawford. La factura física lo ha llevado a un quirófano que aplazará su regreso al ring y que cambia el calendario del boxeo internacional. Mike Coppinger informó en el programa Inside The Ring que el peleador mexicano de 35 años necesita cirugía en el codo. La operación llega en un momento delicado porque su equipo había planeado un regreso para febrero en Riad. El proyecto estaba incluido dentro del contrato con Riyadh Season, que lo vinculó por cuatro combates y del cual ya cumplió dos. Ahora deberá esperar hasta el segundo o tercer trimestre de 2026 para volver a subir al encordado. La derrota frente a Terence Crawford ocurrió en una noche que parecía diseñada para un espectáculo sin fisuras. Allegiant Stadium en Las Vegas se llenó para celebrar el fin de semana de la Independencia de México. El público mexicano lo recibió con los mismos cánticos que lo han acompañado en noches de gloria. La diferencia fue que esta vez no hubo celebración sino una avalancha de golpes que lo despojó de sus títulos del Ring, la FIB, la AMB, el CMB y la OMB. Crawford, invicto en 42 peleas con 31 nocauts, había subido dos divisiones para enfrentar al tapatío. Lo hizo con una precisión que dejó sin respuestas al ídolo. Álvarez cerró con récord de 63 victorias, tres derrotas y dos empates, además de 39 nocauts, una hoja que sigue siendo monumental pero que ahora se detiene por motivos médicos. Un codo dañado reduce la capacidad de contragolpe y frena la velocidad de las combinaciones. Lo curioso es que Álvarez no lo mencionó en su conferencia posterior a la pelea. Sólo insistió en que no piensa en el retiro y que seguirá buscando peleas grandes. La noticia de la cirugía confirma que su cuerpo arrastra más desgaste del que había admitido. FUENTE EXCÉLSIOR