No hay vuelta de hoja, Alma Marina Vitela Rodríguez será la candidata de Morena a gobernadora de Durango. Sin embargo, hay intereses locales dispuestos a todo, porque ven cómo se les escapa el control del estado. El pasado sábado quedó claro que las manifestaciones de rechazo a la candidatura de Marina Vitela no son espontáneas, ni generalizadas. Tienen patrocinadores con nombres y apellidos, que conforman una red de intereses perfectamente identificados y vigilados. Los gritos durante el acto para confirmar a Marina Vitela como precandidata única de Morena, en el Club de Leones de Gómez Palacio, no dejaron dudas. Se trataba de impedir lo inevitable a como diera lugar. De los gritos pasaron a los empujones, los manotazos y la agresión a huevazos contra la camioneta de Mario Delgado. Nada hace pensar que los intentos por arrebatar, a la mala, la candidatura de Morena al gobierno de Durango cesarán. Ni siquiera por los reportes de la inteligencia militar -en poder de esta columna- que describen los antecedentes de las protestas y explican el organigrama de complicidades entre los autores intelectuales. Después de leerlo se entiende que hay mucho, muchísimo más en juego y que es clave controlar la gubernatura. En el Senado de la República deben estar muy atentos al desarrollo de las cosas en Durango, porque podría salir salpicado en caso de estallar el escándalo. Claro, eso no conviene a nadie, incluyendo a Morena y a la 4T. Desactivar la bomba requerirá de una quirúrgica operación política y, de ser necesario, el apoyo verde olivo. Durango no es la única preocupación de Mario Delgado. Oaxaca, Tamaulipas y Quintana Roo también requieren de trabajo fino para apaciguar el natural enojo de quienes ya se veían como gobernadores y perdieron. El objetivo es llegar con la militancia unida el próximo 5 de junio, porque la decisión de quiénes estarán en la boleta está tomada y no hay marcha atrás. Los números hasta hoy siguen dando una amplia ventaja a Morena, pero las campañas aún no comienzan y muchas cosas pueden pasar en el camino. El reto para Mario Delgado es administrar el enorme margen con el que terminó 2021 y mantenerlo lo más posible hasta el día de la elección.  BON APPÉTIT

Movimiento Ciudadano estuvo muy cerca de ganar la gubernatura de Campeche, es la segunda fuerza política del estado. Ahora, tres de sus diputados locales son acusados, por su propio partido, de haber recibido sobornos de Morena. Estaban en juego tres nombramientos: el nuevo auditor superior del estado y los titulares de la Comisión de Transparencia y Acceso a la Información Pública y de la Comisión de Derechos Humanos, ni más ni menos. Daniel Barreda Pavón, coordinador estatal de MC, acusa a Fabricio Pérez, Abigail Gutiérrez y Elías Baeza Baké de que en lugar de trabajar por el bien del estado se han dedicado a participar en negociaciones económicas a cambio de favorecer con el voto a Morena. Dicen que no son iguales, pero se parecen mucho. POR ALEJANDRO CACHO

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